16 feb 2011

El día que el cielo recibió cojones...

Hoy para todo mundo simplemente es el Miércoles 16 de Febrero del año del señor líder de los ejércitos 2011. Para mi, es mi cumpleaños, si 25 vueltas ya a esta bomba de tierra, agua, humanos y animales. Como cualquier otro cumpleaños me levanté pensando en lo que iba a pasar, en como iba a cambiar mi vida una hora después de pasar de los 24 a los 25. Francamente me levanté como si nada, misma rutina de todos los días. Saludo a mi papá, beso a mi mamá, apapacho a mi gata, ida al baño y al dele se ha dicho.

Todo iba bien en la carretera, carros, motos y gente pasaban mientras yo decía (y perdonen mi lenguaje si hay alguien que planeé ofenderse) "Jueputaaaaa, chiquito ya tiene 25, ahora si viene todo por delanteeeee, que se agarren todos porque aquí ahora es como el indio Mayorga, con los tacos al frente y una pata de chancho atrás por si acaso". Estando haciendo un mandado cumpleañero mi mejor amigo me escribe un mensaje, dije, di este mae me llamó a las 12y40 am, que habrá pasado, otro mensaje de cumpleaños, lo veo como si nada, y nada más dice "Mae se murió Santi Santamaría".

¿Quién es Santi Santamaría? Si ud es cocinero y no sabe quién es, hágame el reverendo favor y se quita la gabacha, la quema y nunca más vuelve a tocar nada en una cocina, limítese a comer solo por existencia. Santi era un cocinero catalán, pero no cualquier cocinero, era ese que nunca estudió y que llego hasta adonde 1500 títulos no te pueden llevar. El pobre hijo de agricultores que conoció la riqueza inmensa que da la cocina. El que nunca necesito un químico para sacarle el sabor más sublime a un pollo. Se ganó un pleito con todos por defender que la cocina más básica, adonde los 3 ingredientes básicos son el amor, el respeto y la dedicación le ganan a patadas a las máquinas, a las espumas y a las tecno emociones.

No puedo dejar de pensar que esto es lo que siente un niño o cualquier persona que tiene un ídolo de toda la vida al cual desea emular más que nadie y lo pierden. Los futbolistas tienen a Maradona, a Van Basten, a Maldini o a Ronaldo (en mi caso especial a Enrique Díaz). Los músicos a Bob Dylan, a Jeff Buckley, a John Lennon o a Run DMC. La lista puede seguir y terminar con los cocineros.

Aquí se monta el debate de quién con quién. Yo tenía, tengo y seguiré teniendo siempre a Santi Santamaría, a Marco Pierre White, a David Chang y a Ferran Adriá. De ellos aprendí que la cocina es para la gente que en serio lo quiere, no para el que estudia más o es más aplicado y limpio, si no para el que más lucha. Ahora que se me fue el más grande, como cocinero apago los fogones porque hoy no se cocina. Como fanático lloro la pérdida de uno de los que valen. Como comensal aplaudo la genialidad con la que Santi abrazaba el concepto de la hermosa simplicidad y como simple mortal me alegro sabiendo que hoy es el primer día en serio adonde el cielo recibió cojones.

R.I.P Santi Santamaría 1957-2011.

Daniel El Chef Caníbal...